Llevamos algo más de un
mes de verano y nuestras cuentas de las redes sociales se han ido llenado de
fotos con gente de vacaciones en la playa o en cualquier sitio divirtiéndose.
Si somos de aquellas personas que todavía no han disfrutado de las vacaciones
veraniegas y pensamos que por nuestra situación financiera no tendremos tiempo
para pasar unos días relajados y agradables sin realizar un esfuerzo económico,
aquí os traemos algunas ideas para que esto pueda cambiar y pasar unas
buenas vacaciones sin gastar demasiado.
Prueba con lugares cercanos
Igual a mucha gente le
suena a que esto no serían realmente unas vacaciones ya que asocian el periodo
estival a irse a sitios que están de moda y no piensan quedarse cerca de donde
residen. Seguramente cerca de donde vivimos haya lugares realmente asombrosos
en los que podremos pegarnos unas buenas vacaciones sin tirar la casa por la
ventana. Evitaremos el incómodo jet lag y largas horas en la
carretera. Incluso en nuestra propia ciudad podremos encontrar lugares donde
podamos relajarnos, solo es cuestión de planificar y adaptar las
vacaciones a nuestro bolsillo.
Viajar con los amigos
Si tenemos amigos con los
que nos gusta pasar el tiempo, podríamos proponerle pasar las vacaciones
juntos. Esto es muy útil ya que repartiríamos los costes y ahorraríamos una buena
cantidad de dinero. También podemos dividir los costes del combustible si el
medio de transporte que utilizamos es el coche. Cuanto más repartamos los
gastos, más dinero ahorraremos.
Alquilar una casa o apartamento con cocina
Cuando viajamos en familia
gran parte del dinero se va en los gastos de alimentación ya que en muchas
ocasiones comemos en restaurantes. Para evitar este gasto excesivo y si nos
gusta cocinar, podremos alquilar una casa con cocina. Esto nos permitirá
disfrutar de la familia y al mismo tiempo mantener nuestras finanzas domésticas
a salvo.
Olvídese de los recuerdos
En muchas ocasiones a la
vuelta de las vacaciones casi nos vemos obligados a traer recuerdos para todos.
Si bien podemos comprar un pequeño detalle si el bolsillo nos lo permite, lo
mejor será eliminar este gasto.
Intercambio de vivienda
Esto se está empezando a
hacer popular en los últimos años. También se le conoce como “house swap”.
Consiste en ponerse en contacto con otras personas que quieran pasar unos días
donde resides e intercambiar la vivienda por unos días. De este modo nos
ahorraremos todos los costes relacionados con el alojamiento en nuestras
vacaciones.